martes, 4 de diciembre de 2007

el cambio

hubo una noche, en cafayate.
era un bar. la pizza especial ya se habia acabado. quedaba un poco de cerveza en los vasos.
antes habian caido varias, en la plaza, en el refugio contra la lluvia de enfrente, caminando por el pueblo, en un tronco de la 9 de julio, en el camping.
la mesa de veinte chicos egresados de salta ya no estaba. la gente por la calle caminaba toda en la misma direccion. alrededor el silencio, dentro mio el ruido. no lo calle mas. hable.
gabi yo tengo que decirte algo. llevo dos noches seguidas soñando con vos. anoche soñe que estabamos caminando, sobre arena, yo iba mas adelantado, habia unos pibes que llevaban a otro agarrandolo de los brazos y las piernas. pense que estaban jugando y me divertia viendolos. pero despues lo tiran entre unos ladrillos que formaban una especie de cajon. entonces el pibe al que tiraron empezo a correr y los otros lo perseguian. y este se frena, agarra un ladrillo de la arena y lo tira hacia donde estabas vos. te pego en el brazo, y escucho que gritas me has dañado la mano o algo asi. el pibe vuelve a correr y viene hacia donde estaba yo, y cuando va a pasar por mi lado estiro el brazo izquierdo y cae. pero se levanta enseguida y se planta, como para pelear. yo me planto, nos miramos a los ojos, tuve una sensacion de miedo, me desperte. (gabi me escucha hablar y me mira, yo hablo pero mi mirada esta fija en un punto invisible y solo por momentos se dirige hacia ella). y la noche anterior habia soñado que llegabamos a una ciudad, acababamos de salir de una estacion, no se si de tren de micro o que, y nos ibamos a separar, vos ibas a ir para un lado y yo para otro. caminamos hasta una esquina, nos sacamos las mochilas, las dejamos en el piso, nos miramos a los ojos, te aguante la mirada como nunca pude hacer, y nos besamos. (ahora la estoy mirando) gabi yo no me siento comodo y no me quiero sentir asi. no puedo mirarte. pero por que? pregunta. y con mis ojos en los de ella respondo porque me ahogo.
alrededor el silencio, entre ella y yo una distancia de un paso, insuperable, dentro mio una calma que se empezaba a acomodar. su respuesta me llego desde un lugar que ya conocia. lo importante no parecia ser lo que ella dijera sino el haber sacado una verdad silenciada al mundo exterior.
a mi no me pasa lo mismo.
gabi yo tengo que decirte algo, el principio del fin. a mi no me pasa lo mismo, el final del fin.
lo que vino despues fue la incomodidad logica del momento. decidir que no continuariamos el viaje juntos fue la obviedad.
a la mañana siguiente ella saco pasaje a la ciudad de salta. volvio al camping, armo su mochila y se fue. la despedida fue fria, suerte, gracias igualmente y que te lo pases bien respondi, beso en la mejilla y me sente a ver como se marchaba. no miro para atras.
quede solo en el camping. saque de mi mochila la bolsa de ropa sucia y me puse a lavarla. por primera vez en mi vida lave mi ropa a mano.
el sabor amargo porque el viaje juntos haya terminado asi existe. el sentimiento de culpa no. la tranquilidad de haber hecho lo que crei correcto es verdadera.
alrededor el canto de los pajaros, dentro mio la calma ya instalada. la vida cambio. empiezo un nuevo viaje.

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